Para Marián Cano, representante de los fabricantes de calzados de Valencia, donde Estados Unidos es el primer destino de las exportaciones, la iniciativa será “un duro golpe” para el sector que actualmente enfrenta la pandemia, con un consumo de moda alicaído e importantes dificultades a nivel económico.
Por su parte, Manuel Román Ibáñez -presidente de AEC/Proveedores- afirmó en un comunicado de la entidad: “Tal es el daño que nos puede generar, si la Unión Europea y España no llegan a un acuerdo inmediato con los Estados Unidos, y dicho arancel finalmente entra en vigor, que se perderán contratos, operaciones comerciales, pedidos, inversiones y por consiguiente, puestos de trabajo, sin mencionar las penalizaciones por las responsabilidades subsidiarias de las condiciones contractuales ya acordadas que pueden ser millonarias, deteriorando aún más la situación de las empresas españolas de nuestro sector, a las que la pandemia ya las ha dejado fuera de juego”.