En un particular momento, donde las pieles y cueros enfrentan una fuerte competencia de materiales alternativos y cuestionamientos sobre su uso desde sectores de la ecología y sustentabilidad, procuran mantenerse vigentes a partir de sus características más importantes. Entre ellas, su origen natural, y en tal sentido se trata de exaltar sus texturas y porosidades originales, aún irregulares, más las propiedades físicas únicas, como su suavidad, flexibilidad y tacto.
Así surgen las superficies lisas, procesadas física y químicamente para resaltar estas cualidades, con un tratamiento cromático amigable con su origen natural. Son tonalidades suaves y pasteles, pigmentadas desde los básicos.